¿Como se hace una máscara tradicional costarricense?
¿Como se hace una máscara tradicional costarricense?
Para muchas
personas, la mascarada costarricense es una oportunidad para desarrollar su
creatividad y habilidades en la creación de una de las Gigantonas, los Mantudos,
disfraces del Pisuicas o personajes de los mitos típicos
costarricenses. A veces las celebraciones abren la puerta al emprendimiento. En esta fiesta participan niños, jóvenes, adultos y abuelos.
¿Quién no se ve afectado por las historias de sus antepasados? Las
historias de leyendas hacen que el miedo invada el cuerpo. Pero en este caso, el sentimiento de
miedo no es el protagonista principal,
pues en esta celebración la alegría
se desborda. En recuerdo de las mascaradas en
Costa Rica se realizan los famosos desfiles
en los que no pueden faltar las cimarronas y la música. Algunos caminan con disfraces y máscaras, algunas hechas por ellos
mismos. ¿Alguna vez has hecho tu propia máscara? Siempre he
admirado las máscaras con cuernos como la
Pisuica, o la nariz y el sombrero de bruja,
muchas veces me pregunto cómo lo hicieron. Con el tiempo me di cuenta de que este tipo de máscaras requieren mucho trabajo y no todos son capaces de hacerlas, porque se requieren ciertas habilidades.
·
Un breve resumen del origen de las mascaradas
Hoy en
día, pueblos como Escazú, Sarchí y Barva, que
tienen un ambiente de fiesta muy distintivo, prosperan con bailes de
máscaras y festivales cimarrones. Pero sus inicios
tienen sus raíces en la colonia de Boruca.
Esta tradición ha sido adoptada de un cruce entre el "baile de los diablitos" y la España antigua. El baile de los diablitos es una celebración de tres días que marca el triunfo de los Diablitos (nativos de Costa Rica) ante los toros (colonos españoles) a través de bailes ancestrales, máscaras y fiestas. Esta tradición simboliza la resistencia de muchos pueblos y el eventual logro de la independencia del país. Es un tiempo de celebración, un tiempo para recordar la identidad nacional y para “reírse” de la muerte y la adversidad.
· ¿Cómo se fabrican?
No hay ingredientes
específicos que deban usarse para hacer una máscara perfecta, depende de la creatividad, imaginación, habilidad, tiempo y dedicación de cada persona, así como del objetivo final. Existen diferentes técnicas para la elaboración de máscaras, una de ellas es el barro, donde el trabajo manual requiere de motricidad
fina y habilidades de expresión creativa.
Actualmente se utilizan
técnicas como la fibra de vidrio y el látex, debido a su
durabilidad y facilidad de uso. Pero según el artista
costarricense Carlos Arguedas, propietario de Galería Arte Expresión, el
proceso de producción tradicional es diferente.
Primero, se usa una capa de
arcilla para crear la forma de máscara deseada,
cubriendo una lata vacía de pintura o manteca,
dejando espacio para la cabeza. Se ha aplicado una capa de papel
con agua para que no se pegue a la arcilla, ya que
se desprenderá al secarse.
Luego, con periódicos,
reutilicé papel Kraft y bolsas de azúcar de antaño
y pegamento de almidón, capa por capa. Para que la máscara
fuera duradera y tuviera la forma deseada. Tras
obtener unas 10 capas de este
compuesto, se aplica una capa final con papel mache.
Esto permite agregar más detalles y textura a
la composición final.
Y después de estar satisfechos con el trabajo, se ponen las máscaras en frascos para que se secaran al sol. Al ser un proceso largo, los mascareros solían hacer múltiples máscaras al mismo tiempo, por lo que en la década de 1940 era común ver patios o techos llenos de máscaras de barro. Cuando la máscara esté lo suficientemente seca, el barro se agrietará y saldrá de la lata de pintura. Deja capas de cartón listas para ser pintadas en colores muy vivos con pintura al óleo. Lo curioso del proceso tradicional es que cada máscara es única, ya que el molde de barro se rompía al secarse, no se podía hacer una copia exacta y había que empezar el proceso desde cero. Ha habido muy pocos casos en los que la gente haya trabajado con plantillas guardadas.
A pesar de la situación de
pandemia que aún se vive hoy, no deje atrás la cultura de nuestro país, e
incentive a los más jóvenes a transmitir de generación en generación las
tradiciones costarricenses, así como lo es la mascarada, aunque por suerte ya este
año 2022 se pudieron realizar estas mismas, talvez no en todos los lugares, y
talvez no con la misma fuerza de antes, pero ya es un avance, y es un indicio
de que estas tradiciones están volviendo y que ojala pueda volver a ser lo que
era antes, porque al final de todo estas tradiciones son parte del país y de
uno mismo, sin más, esta fue mi reseña, espero y sea de su agrado.
Autor: Alessandro Soto B
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